A la hora de decidir entre invertir en pasto sintético o césped natural, puede ser difícil saber qué opción es la mejor para ti. El césped artificial puede tener un costo inicial mayor, pero se convierte en una inversión más valiosa a largo plazo. Acá te dejamos las cuatro razones principales por las que vale la pena comprar pasto sintético.
Ahorras tiempo y energía
El césped natural requiere de mucho más mantenimiento, ya que las hojas vivas requieren de sistema de rociadores, fertilizantes, corte de crecimiento y de más materiales para su cuidado. Progresivamente, la cantidad de dinero que gastarías solo en mantenimiento de pasto real te serviría para invertir en pasto sintético.
El césped artificial es un ahorro no solo de tiempo y esfuerzo, también lo puede ser de dinero a largo plazo, ya que lo que cuesta es la inversión inicial, su mantenimiento es mínimo. Si quieres saber más sobre los cuidados del pasto sintético pásate por nuestro blog sobre cómo hacer la limpieza.

Aumenta el valor de tu vivienda
¡Así mismo como lo lees! Invertir en pasto sintético aumenta el valor de tu hogar. Si lo vemos desde el punto de vista estético, tu vivienda tendrá una transformación total, aunque parezca impresionantes, tus jardines o el sitio donde escojas hacer la instalación, se verá más moderno, bello y atractivo.
Por otro lado, si pensamos en la economía, la factura de agua será menor, porque no tendrás que integrar sistemas de rociadores de césped a tu jardín.
Es mejor para el medio ambiente
Aunque pueda sorprenderte, porque el césped artificial es de material sintético. Es importante que sepas que deja un gran aporte al cuidado ambiental, dado que no estás sembrando ni fertilizando el pasto, tampoco debes eliminar malas hierbas con un herbicida, así que, no aplicarás sustancias químicas sobre tu césped.
Los productos químicos convencionales que se aplican al pasto natural pueden llegar a los sistemas de agua y envenenar a animales y plantas que estén en contacto. Adicionalmente, también colaboras con el ambiente por lo que ya te comentamos más arriba sobre el ahorro de agua, disminuyes tu consumo de este elemento.
¿Has pensado en la cantidad de productos químicos de cuidado de jardín y los litros de agua que gastarías anualmente con pasto natural? Es impresionante. Invertir en pasto sintético te ayuda a preocuparte menos y ayudar más a la Tierra.

Invertir en pasto sintético es crear un ambiente amigable para tu mascota
Si tienes una mascota, es una oportunidad para crear un patio de ensueño que sea apto. Las mascotas no pueden cavar hoyos, así que no te preocuparás por desastres de jardín. Tampoco te preocuparás por malos olores o acumulación de bacterias, el sistema de drenaje colabora a que esto no ocurra. Además, la textura es completamente reconfortante para que sus pequeños peludos se acuesten, jueguen y se diviertan.
Tenemos un artículo especial que habla sobre césped artificial y mascotas, donde te mencionamos algunos aspectos relevantes de la interacción entre tus compañeros peludos y el pasto sintético.
Al final del día, si analizas estos puntos con determinación, verás que vale la pena invertir en pasto sintético. Se ve muy bien, te permite ahorrar recuerdos, tiempos y energía. Adicionalmente es amigable con tus mascotas y con el medio ambiente, ¿qué más podrías pedir? Si estás considerando instalar césped artificial, contáctanos, en Sugarden queremos ayudarte en la creación de tu jardín soñado.